Frases como "Si yo soy malo y voy de primero, ¿qué se dejará para los demás?", "No creo que un equipo que esté de primero tenga sinsabores", “Perdimos un partido de 12 y tengo la pistola todo el tiempo en la cabeza” y “Nos estamos preparando para fluir en los cuadrangulares”, pronunciadas a lo largo del semestre por el técnico saliente del Junior, César Farías, quedaron sin validez con la pésima campaña cumplida por el equipo tiburón en la instancia semifinal, en la cual sumó un punto de 18 posibles y quedó eliminado de la final.

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A raíz de esto, al técnico venezolano le rescindieron el contrato que tenía vigente hasta diciembre de este año, una decisión que se veía venir y que solo estaba a la espera de que el equipo tiburón cerrara su participación en el torneo.

Fuad Char, el mismo que en medio de abrazos y sonrisas presentó a Farías al grupo de jugadores como nuevo entrenador el 3 de septiembre del año pasado en el estadio Romelio Martínez, confirmó el viernes que su paso por Junior ya era historia y que su más seguro reemplazo será el uruguayo Alfredo Arias.

No fueron fáciles los últimos días de Farías como técnico de Junior. En los cuadrangulares perdió cinco partidos de manera consecutiva y esto propició que su continuidad ya no estuviera asegurada, como semanas atrás cuando decía que ya estaba planificando la confección del equipo para el segundo semestre.

Después de la derrota como visitante 1-0 ante el Medellín, que sentenció su eliminación, a Farías le preguntaron por su continuidad y respondió de forma tajante “tengo contrato”.

Tras la caída en casa ante el América volvió a hablar del tema y dejó la puerta abierta a una posible salida: “Si me tengo que ir me voy a dar la mano y un abrazo con don Fuad (Char)”.

El exsenador era el mayor respaldo que tenía el venezolano, quien no perdía oportunidad para elogiarlo en público, pero ese apoyo también quedó sin efecto por los malos resultados de Junior en los cuadrangulares.

Al final del encuentro contra Tolima, en Ibagué, reconoció que Junior había hecho unos cuadrangulares “para el olvido”. Fue la última vez que dialogó con la prensa, porque después no se le vio al regreso del equipo rojiblanco de la capital tolimense.

El venezolano fue más verborrea que buenos resultados, porque el año pasado clasificó gracias a los tres puntos que Junior le ganó en el escritorio a Nacional y a la última fecha del cuadrangular llegó con opción de pasar a la final, pero la derrota 1-0, en una mala presentación en Cali ante el eliminado América, consumó su segundo fracaso con el equipo. El primero había sido la eliminación de la Copa Colombia, por penales, ante el Medellín.

En el primer semestre de 2025, el gran reto para Farías era conseguir el ingreso a la fase de grupos de la Copa Sudamericana que disputaría en partido contra América, en Barranquilla. Incluso, Fuad Char, desde antes de iniciar la competencia en la Liga, le dijo al venezolano que este era “el partido del año”.

Pero Junior no pasó del empate 2-2 ante los escarlatas (iba perdiendo 2-0 al término del primer tiempo) y en la tanda de penales cayó 4-3 y quedó eliminado del torneo.

Fue la primera vez que la continuidad de Farías en Junior estuvo seriamente amenazada. Al partido siguiente, contra Millonarios en el Metropolitano, hubo pancartas en contra de la gestión del técnico y se escuchó el “Farías ya se va”, que se espantó con el triunfo agónico 2-1, con gol de penalti del ‘Titi’ Rodríguez.

A partir de ahí enlazó cinco victorias consecutivas que lo llevaron al liderato de la Liga, pero el juego de su equipo seguía sin convencer. No obstante, empezó a pasar facturas de cobro cuando el torneo apenas iba por la mitad.

Terminó siendo el mejor visitante, a diferencia del año pasado donde no ganó un solo partido por fuera de Barranquilla. Su clasificación a los cuadrangulares la logró de manera anticipada y cerró la fase todos contra todos con un gran triunfo 3-2 de sobre Nacional, en Medellín, que puso a soñar a la hinchada juniorista con grandes cosas.

El sorteo de los cuadrangulares ubicó a Junior en el mismo grupo con Tolima, Medellín y América. No le tocó ninguna plaza de altura y eso fue catalogado como un alivio.

El optimismo de Farías era evidente, se notaba en sus declaraciones antes de arrancar la competencia.

“Estamos bien, llegamos sanos y fuertes. Otros clubes están llegando con muchos lesionados, pero nosotros estamos sanos, todos están disponibles”.

Pero en el primer partido, que empató 1-1 en casa con Tolima, comenzó la debacle. No solo no pudo imponer la localía, sino que perdió por lesión a Teófilo Gutiérrez, un jugador que no estaba en sus planes (“los años no pasan en vano”, dijo), pero del cual terminó aceptando que fue influyente para el equipo.

Junior no pudo reponerse de ese mal resultado y perdió los cinco partidos siguientes. El equipo terminó diezmado por las lesiones de Carlos Bacca y de Déiber Caicedo, la venta al Monterrey de Santiago Mele y las expulsiones de ‘Titi’ Rodríguez y José Enamorado.

César Farías se va de Junior sin dejar ninguna herencia. Su paso por el cuadro rojiblanco será más recordado por sus extensas respuestas en las ruedas de prensa, por su fuerte encontrón con el periodista José Hugo Illera y por no reconocer nunca sus equivocaciones.

Junior, en la noche de este sábado, a través de un comunicado, confirmó la salida del técnico venezolano. 

🚨COMUNICADO DE PRENSA🚨 pic.twitter.com/pzs27iwmOD

— Junior FC (@JuniorClubSA) June 22, 2025